Llega la primavera…, vuelven las alergias

Se prevé que entre los años 2015 y 2020 un 50% de la población urbana sufrirá algún tipo de alergia.

Un 21% de la población de Cataluña sufre alguna alergia, que se ve agravada con la llegada del buen tiempo y la aparición del polen en la atmósfera. Los estudios epidemiológicos demuestran que la incidencia de este tipo de enfermedades está aumentando en los últimos años a los países occidentales.

Las principales enfermedades causadas por las reacciones alérgicas son la rinoconjuntivitis, que afecta entre el 5 y el 15% de la población, y el asma, que afecta entre un 5 y un 10%. Por otra parte, el 78% de los asmáticos lo son a causa de una alergia.

¿Qué alergias sufren los leridanos?

Un estudio realizado en Lleida a 424 personas con alergia respiratoria nos dice que el 96% tienen rinoconjuntivitis, el 42% asma y el 79% son alérgicos al polen. La mayoría en gramíneas (57%), bledos (49%) y olivo (34%). En los Pirineos hace falta tener presente, además, los árboles como el abedul, el fresno y el avellano, y que hay poca cantidad de bledos. También hay que tener en cuenta que en la alta montaña la floración de las hierbas aparece de 1 a 2 meses más tarde respecto al llano.

Alergia al polen

La alergia al polen es la que más ha aumentado en las últimas décadas, de hecho, su incidencia se ha duplicado en la mayoría de países europeos. Esta alergia es, precisamente, la que más se acentúa en primavera.

El estudio del polen a la atmósfera

A medida que aumenta la concentración de polen a la atmósfera, aumentan también el número de personas que presentan síntomas de alergia.

La Red Aerobiològica de Cataluña "http://lap.uab.cat/aerobiologia" dispone de diferentes captadores de polen, ubicados en nuestra provincia en las ciudades de Lérida y Vielha, que permiten conocer el calendario polínico y las previsiones de concentración de polen.

Este es un resumen del pronóstico:

• de enero a mayo: polen de cipreses
• de marzo a abril: polen de plátano de sombra
• de mayo a junio: polen de olivo y gramínea
• de mayo a octubre: polen de bledos

Las personas alérgicas pueden serlo a sólo un polen o bien a diversos, hecho que hace que se alargue mucho el periodo durante el cual sufren los síntomas.

Hace falta recordar también que la pelusa de los chopos que aparece en los meses de abril y mayo no causa alergia.

Se trata de la semilla de estos árboles, y los estudios demuestran que, aparte de no penetrar en las vías aéreas por su tamaño, no provoca reacción alérgica.

El polen no siempre es el culpable

En primavera y en verano aumentan otras partículas atmosféricas que causan alergia y no son polen: se trata de las esporas de hongos, básicamente del tipo alternaria. Los hongos se reproducen por esporas microscópicas y son, muchas veces, más abundantes en el aire que los granos de polen. Su aumento se debe a la temperatura elevada y a las actividades agrícolas como la siega y la recolecta de la fruta. De hecho, los alérgicos a la alternaria tienen un claro empeoramiento si van a recoger fruta. También es habitual que las esporas de hongos aumenten cuando hay tormenta o sopla el viento.

Los síntomas que causa la alergia

Las personas que sufren alergia respiratoria tienen síntomas nasales (rinitis), oculares (conjuntivitis), pulmonares (asma, tos); pero también pueden tener molestias faríngeas (picor, tos), ópticas o cutáneas.

La gravedad de la alergia va ligada directamente al asma, enfermedad potencialmente grave de forma aguda o crónica; pero también a la intensidad y la frecuencia de síntomas en órganos no vitales, como la nariz o los ojos, ya que representan una grave interferencia en la vida cotidiana.

¿Cómo podemos prevenir y tratar la alergia?

Conocer la causa de la alergia es fundamental para poder hacer un tratamiento correcto y adoptar medidas de prevención. El tratamiento ideal es evitar respirar las partículas que causan la alergia, pero ésta es una misión casi imposible. Los fármacos de que disponemos controlan los síntomas pero no los cuidan: al dejar de tomarlos, éstos reaparecen de nuevo. Muchos casos tienen bastante con los medicamentos pero hay un grupo de personas con molestias importantes, que a veces no responden en los fármacos, o que les duran 3, 4 ... hasta 8 meses el año. Es cuando se puede proponer un tratamiento con inmunoterapia o vacuna: se trata de administrar dosis repetidas de un extracto de la partícula que causa la alergia por inyección a bajo la piel o con gotas o comprimidos a bajo la lengua.

De esta manera se puede conseguir una pérdida o reducción de la alergia. La ventaja, aparte que es un tratamiento natural, es que puede modificar la evolución de la enfermedad y puede conseguir efectos perdurables. Las vacunas, sin embargo, no están exentas de riesgos, ya que pueden provocar reacciones alérgicas en el momento de la administración.

¿Qué pasa con las abejas y las avispas?

Otra de las alergias que aparece durante la primavera y el verano viene derivada del veneno de los himenópteros (abejas y avispas). La picadura de estos insectos puede poner en peligro la vida de las personas alérgicas a su veneno, que se calcula que son entre un 0,8% y un 2,5% de la población. ¡Cuándo se produce una picadura, una sola picada!, estos pacientes pueden sufrir una reacción alergia generalizada (anafilaxis). Cada año mueren en España de 3 a 10 personas por este motivo. Desgraciadamente este problema sólo se detecta una vez ha habido una reacción; y normalmente afecta personas que trabajan al aire libre o apicultores. Si las pruebas de alergia confirman el diagnóstico, se indica una vacuna que ofrece protección ante nuevas picaduras. Además tienen que tener disponible un equipo de autoinyección de adrenalina para usarlo en caso de sufrir una nueva picadura con reacción. Hay información actualizada sobre esta alergia a la página web "http://www.alergiaabejasyavispas.com"

Dr. Lluís Marquès Médico alergólogo. Avantmèdic.