Cirugía Plástica
‘Mommy Makeover’, Cirugía Plástica y Estética tras el parto y la lactancia
Dra. Mª Encarna Carreño Hernández, Embarazo, Implantes mamarios, Postparto Y Prótesis mamarias
Una tendencia estética que engloba diferentes técnicas de Cirugía Plástica como: aumento o reducción mamaria, cirugía abdominal para reducir el exceso de piel y de grasa, y cirugía corporal, principalmente la liposucción. Todo para quedar “estupenda” después de ser madre.
Durante el embarazo y el parto, el cuerpo de la mujer sufre un enorme desgaste y cambios en su imagen corporal. La figura no es la misma que antes de tener al bebé y una de las preocupaciones que muestran las mujeres es si recuperarán la figura y cuándo, sobre todo del pecho y del abdomen, las dos partes más susceptibles a los cambios que conlleva la gestación.
A lo largo del embarazo, el pecho se va preparando para la lactancia, hay un aumento del tamaño de la glándula, con distensión de la piel y la areola. Cuando cesa el estímulo de la lactancia, el volumen del pecho se reduce bruscamente. Cambia la forma, el tamaño y, sobre todo, su firmeza. Esta transformación provoca flaccidez de la mama y pérdida de consistencia. Las estrías que aparecen por la distensión de los tejidos también son consecuencia del cambio de volumen. Es como si la mama se quedara "vacia".
Cualquier tipo de cirugía en este periodo se debe realizar una vez pasados aproximadamente 6 meses después del parto o lactancia, para dar tiempo a que los tejidos se retraigan al máximo.
La mujer busca sentirse bien consigo misma y poder vestir con naturalidad, sin tener que recurrir a rellenos o sujetadores especiales para parecer que tienen más pecho. Para conseguir que la mama vuelva a ser firme y bonita podemos realizar una mastoplastia de aumento. Procedimiento quirúrgico encaminado a mejorar el tamaño y la forma del pecho. Para ello se introduce un implante o prótesis mamaria. Durante la primera visita evaluaremos tamaño y forma de los pechos, la firmeza de la piel, así como el estado general de salud. Es importante realizar una exploración mamaria minuciosa, y en determinados casos solicitaremos pruebas complementarias como una ecografía mamaria o mamografía. Esta cirugía se suele realizar de forma hospitalizada, en un quirófano y bajo anestesia general. La duración media de la intervención está aproximadamente entre 1 a 2 h.
El resultado que se obtiene es inmediato, pero deberemos esperar un periodo de un mes para ver el resultado definitivo. La vuelta a la actividad diaria normal, podrá realizar-se a partir de los 15 días.
En ocasiones, además de realizar el aumento mamario es necesario elevar la mama mediante lo que se conoce como mastopexia. Esta intervención quirúrgica nos permite devolver a la mama a su posición natural u original mediante la extirpación de la piel sobrante y fijación del tejido glandular. Así pues la elevación puede realizarse conjuntamente en la misma intervención de aumento de mamas, o como procedimiento único en los casos en que la mujer tiene un volumen mamario adecuado y no desea incrementarlo.
Otra zona corporal que también se puede afectar durante el embarazo es al abdomen. A medida que avanza la gestación se produce una separación de la musculatura del centro del abdomen de la madre, lo que se conoce como diástasis muscular y que junto a la distensión de su piel permite el aumento de su tamaño. En el caso de tener una piel fina y poco elástica es normal que aparezcan flacidez y estrías, factores que dificultan la recuperación del perfil plano deseado.
Después del parto, la musculatura va recuperando su tono (que podemos ayudar con la práctica de ejercicio físico específico) y la piel también se va retrayendo. Si la recuperación del abdomen no es completa, observamos descolgamiento abdominal, con exceso de piel y estrías. La mejor solución para este problema es la abdominoplastia, en la que extraemos el exceso de piel, tensando el abdomen. Al mismo tiempo podemos corregir la diástasis de la musculatura abdominal, reforzando los músculos de la pared abdominal que han perdido elasticidad tras los embarazos y cuya firmeza no se recupera con dieta ni con ejercicio físico.
Otra intervención quirúrgica demandada tras los embarazos es la liposucción para poder eliminar los acúmulos de grasa que se ocasionan debido a los cambios hormonales que se dan.
La grasa que se extrae mediante la técnica de liposucción la podemos utilizar para rellenar la mama que ha quedado vacía. Por lo general han de ser mamas no excesivamente grandes. Esta técnica quirúrgica se conoce con el nombre de lipofilling o trasplante de tejido graso en mamas.
Hoy en día, todas estas intervenciones pueden realizarse conjuntamente y están más al alcance de todas las mujeres ya que la Cirugía Plástica, Reparadora y Estética está más extendida socialmente.
En cualquier caso estar "estupenda" después del parto no es más que una cuestión de criterio o prioridad personal de cada mujer y sus circunstancias. Decida a dar el paso, lo primordial es la salud; de ahí la importancia de ponerse en manos de médicos y cirujanos especialistas que con su profesionalidad y honestidad actúen con el objetivo de contribuir al bienestar físico y emocional de la mujer en su maternidad y todos sus demás ámbitos de realización.
Dra. Mª Encarna Carreño Hernández Especialista en Cirugía Plástica, Reparadora y Estética