Fisioterapia
Text neck. Descoloque total!
Consejos, Lesiones, Niños, Nuevas tecnologías Y Sra. Mercedes Sancho Monzón
Los hábitos de posición de nuestro cuerpo cuando usamos la tecnología móvil puede producir un síndrome conocido como Text neck, causado por mirar durante largos periodos de tiempo la pantalla de la tablet o el móvil, en posiciones incorrectas.
Párate un momento y fíjate en tu postura mientras estas leyendo este artículo: ¿Estas sujetando tu smartphone o tu tablet a la altura de tu cintura mientras inclinas la cabeza hacia delante? Piensa: ¿Cuantas horas al día pasas pegado a tu tablet o smarphone? Imagina las consecuencias para tu salud músculo-esquelética de mantener esta postura durante tanto tiempo.
La primera vez que se habló del Text Neck fue en el año 2008 por Dean L.Fishman, quien puso este término para referirse a un conjunto de síntomas músculo-esqueléticos que aparecen tras el uso prolongado de móviles, tablets, y otros dispositivos que obligan a la columna cervical a adoptar una postura forzada mantenida en el tiempo.
Al inclinar la cabeza hacia adelante aumenta mucho la carga, por lo que la musculatura tiene que ejercer una mayor fuerza para que esta palanca siga en equilibrio. El resultado es que la posición prolongada de la cabeza hacia delante genera numerosas lesiones músculo-tendinosas a nivel cervical.
El principal problema del Text Neck es que se trata de un síndrome relativamente reciente, y que ha tenido un aumento exponencial debido a la rápida expansión de las nuevas tecnologías, por lo que desconocemos los efectos a largo plazo en el sujeto.
Aun así, a corto plazo se produce:
- Postura: cabeza adelantada y disminución de la curva cervical.
- Dolor e inflamación de las carillas articulares cervicales.
- Aumento del tono de la musculatura con aparición de contracturas musculares de defensa y rigidez de cuello.
- Desplazamiento posterior del disco (produciendo una compresión del ligamento común vertebral posterior y siendo el inicio de una hernia cervical).
- Mareos y dolor de cabeza.
- Secundario a estos problemas puede haber bruxismo, insomnio, y otras alteraciones neurovegetativas.
Otros problemas derivados del uso y abuso de las nuevas tecnologías pueden ser:
- Tenosinovitis de Quervain: sobrecarga a nivel de la base del dedo pulgar, por pasar mucho tiempo tecleando en la pantalla
- Lesiones nerviosas del túnel carpiano: compresión del nervio mediano por una postura forzada de la muñeca mantenida en el tiempo
- Fatiga visual y trastornos del sueño: por la luz de las pantallas.
Todos somos propensos a sufrir de estas malas posturas, pero debemos prestar especial atención en el caso de los niños y los jóvenes, ya que cada vez utilizan estos aparatos a una edad más temprana.
Si ya hemos observado alguno de estos síntomas en nosotros, es importante consultar con un fisioterapeuta que valore nuestra lesión y nos realice las técnicas más adecuadas. Básicamente, estas técnicas consistirán en: dar movilidad al segmento craneo-cervical y a la columna dorsal, tratar la musculatura, reeducación postural mediante ejercicios y algunos consejos enfocados a las necesidades particulares de cada persona.
A modo de prevención de este síndrome del siglo XXI, nos será muy útil seguir estas recomendaciones:
- Reducir y espaciar el tiempo que usamos los dispositivos móviles, tomando periodos de descanso para modificar la postura y movilizar el cuello.
- Utilizar estos aparatos a nivel de nuestros ojos para evitar bajar la cabeza y mantener el cuello recto. Existen aplicaciones que nos podemos descargar en nuestros dispositivos de manera gratuita (como el “HeadUp”) que nos indican cuando estamos utilizando nuestro móvil o tablet a la altura correcta para que no sufran nuestras cervicales.
- Colocar el dispositivo sobre una superficie plana, de manera vertical con un soporte y a una altura que permita tener el cuello recto (usar una base en la mesa que pueda elevar un poco más la tablet); de esta manera evitaremos sujetar/cargar con los brazos el aparato.
- Crear un horario de uso para los más pequeños y corregir las malas posturas, ya que desde temprana edad nuestros hijos pueden desarrollar dolores propios de la edad adulta.
- Para escribir, usar un teclado portátil o utilizar mensajes de voz. Si aún así hemos de escribir en la pantalla, escoger un teclado grande y alternar los dedos para no focalizar el estrés siempre sobre el dedo pulgar.
- Evitar el uso de estas pantallas antes de dormir, afecta directamente los ciclos de sueño causando mayor dificultad para dormir.
Deseo que este pequeño artículo os haya alertado un poco sobre la importancia de mantener una buena “colocación tecnológica”. Si mientras lo habéis estado leyendo desde el dispositivo, os “habéis des-descolocado” invitados por estos pequeños consejos:
Sra. Mercedes Sancho Monzón Fisioterapeuta